Desde su inauguración en 1959, la Clínica Adventista Belgrano se ha destacado por su constante compromiso para potenciar la labor médica.
Hemos logrado avances significativos, tanto en la atención ambulatoria y la cirugía (general y de urgencia) como, especialmente, en la cobertura de áreas de alta complejidad. Este último punto es un claro reflejo de nuestro desarrollo y de la creciente confianza que el público ha depositado en nuestra institución.
La Clínica Adventista Belgrano forma parte de la red mundial de salud Adventist Health con presencia en más de 30 países con hospitales y un total de 1,000 instalaciones de salud en más de 130 países.
El Ministerio de Salud de la Iglesia Adventista del Séptimo Día opera un sistema global de asistencia sanitaria, abarcando cientos de clínicas, hospitales, sanatorios y dispensarios en todo el mundo.
Contamos con un equipo de profesionales de reconocida trayectoria y en permanente actualización en diversas especialidades. Nos motiva ofrecer la mejor atención personalizada, centrada en la individualidad y trascendencia física, mental y espiritual de cada paciente. Esta visión holística es el pilar de nuestra acción asistencial y justifica el soporte tecnológico que nos acompaña.
Este perfil distintivo, arraigado en nuestras creencias cristianas, se manifiesta de manera especial en nuestro equipo de enfermería, que es un verdadero orgullo institucional. La formación profesional de nuestros enfermeros está avalada y supervisada por las prestigiosas escuelas de enfermería de la comunidad adventista, tanto en Argentina como en el exterior.
Nacida con el propósito de servir, la Clínica Adventista Belgrano ha mantenido vivos sus objetivos fundacionales: educar para la salud, prevenir enfermedades y, principalmente, asistir al paciente con servicios médicos calificados y actualizados.
Sobre todo, nuestra Clínica aspira a brindar un servicio de alta calidad basado en el conocimiento científico, la aplicación de tecnología de vanguardia y la esperanza y fe en Dios.
Brindar servicios para la salud de calidad continua, con un constante testimonio de respeto a la persona humana como creación de Dios.
Ser una institución cristiana al servicio de la sociedad, comprometida en promover un estilo de vida saludable brindando atención integral, personalizada, ética y calificada.
Restaurar física, mental y espiritual al ser humano, brindando un servicio integral de excelencia, fundamentado en la esperanza de una vida plena en Cristo Jesús.
Respeto a la independencia de las personas, a su dignidad e intimidad, como también a su privacidad y marco cultural incluyendo costumbres y creencias que no afecten a otras personas o a la misión de la institución.